Una esperanza para el pueblo, así se lo definía al presidente de la republica Fernando Lugo hace un año atrás durante la campaña de su candidatura, sin embargo hoy es otra la realidad que tiñe su gobierno, un país donde los ciudadanos han perdido la confianza dada hacia su gobernante, un país donde la pobreza, la desigualdad y la falta de moral son quienes gobiernan y no permiten el progreso de sus habitantes. El 20 Abril del año 2008 tras la derrota del partido colorado se sentía venir importantes cambios en el país especialmente para el sector popular tras la subida al gobierno de la república del ex obispo de San Pedro Fernando Lugo, es evidente que la figura de Fernando Lugo supo como vender promesas al pueblo, nos vimos esperanzados en la imagen de un sacerdote, ¿será esto, porque el paraguayo es tan creyente a su fe católico y se dejo segar por lo que proyectaba el actual mandatario? Diría que el Paraguay ha sufrido tanto con otros gobiernos anteriores que no encontró otra salida que refugiarse en la figura que ofrecía el ex obispo y ahora presidente de la republica Fernando Lugo.
¿Qué ocurrió un año después?
Uno de los acontecimientos que marco la directiva del Presidente de
Promesas del Mandatario:
Combatir la extrema pobreza en las zonas más afectadas.
Centrar su atención en la situación de las etnias indígenas, los campesinos, los paraguayos en situación de emigrantes, los niños de la calle y los pobladores del cinturón de pobreza de la capital
¿Pero cuál es la realidad después de un año de gobierno?: ha aumentado notablemente la pobreza, la falta de empleos, los indígenas se hayan en situación de riesgo, hay más compatriotas en el extranjero que en Paraguay, nos resulta un poco incomodo abordar un ómnibus por las criaturas que se suben a cantar o ha ofrecer estampas para sobrevivir y esto se debe a nuestra propia seguridad y no por denigrar.
En el análisis realizado acerca de los primeros 100 días de gobierno del Presidente de
En varias ocasiones el Presidente dijo “no hay un plazo estimado para lograr el mejoramiento del país” y en las mayorías de las veces que ha realizado su discurso instaba al pueblo formar parte de la lucha sin banderías de por medio, como también de las supuestas persecuciones políticas que se empeñaban a obstaculizar su labor como Gobernante.
Mas del 60% de la población afirmaba en su opinión que el Gobierno de Fernando Lugo seria bueno; pero grande fue la desilusión para los seguidores que confiaban en sus promesas al confirmarse la paternidad y la vida escandalosa que se venia arrastrando el Presidente y esta desconfianza no solo afecto su imagen como Gobernador de
En conclusión desde aquel 20 de Abril del 2008 hasta la actualidad el único cambio más resaltante y trascendental que ha ocurrido en el Paraguay ha sido la derrota del partido colorado, por otra parte las promesas siguen perdurando en la mente del pueblo esperando que pase de la fantasía a la realidad.
ANGEL SARACHO
ESTUDIANTE DE PERIODISMO
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